En este libro de ideas vamos a hablar de un espacio cuya importancia a veces pasamos por alto: los halls de entrada.
Como ocurre con la fachada, los halls de entrada son la antesala a nuestros espacios interiores. Es por eso que tenemos que ser cuidadosos en el diseño, la decoración y la elección de los muebles y accesorios más adecuados para este espacio. También debemos tener en mente que el estilo de este recinto transicional debe ser un adelanto de lo que se encontrará en el resto de la casa.
Otro aspecto del que se habla poco, es la puerta principal, que debe integrarse tanto a la fachada, como al hall de entrada, por lo cual ésta es una elección que debe hacerse teniendo en mente esta doble función.
Los invitamos a recorrer algunos de nuestros halls de entrada favoritos, que tienen la dualidad de ser elegantes y al mismo tiempo muy acogedores.
Es importante en los halls de entrada tener alguna superficie donde podamos dejar las llaves al entrar. Si tenemos el espacio, una mesa sería idea, pero en halls de entrada angostos, la mejor solución suele ser un estante flotante.
La iluminación del hall de entrada va mucho más allá de la parte estética, también es necesario que está muy bien pensada, especialmente cuando llegamos a casa de noche. En este espacio, la iluminación de abajo hacia arriba acompaña durante todo el pasillo y hace que los techos parezcan más altos.
En estos tiempos de pandemia, se ha convertido casi en una necesidad tener algún pequeño ropero en el hall de entrada, para dejar la ropa y zapatos que traemos de la calle. En países con cuatro estaciones bien definidas, esto es bastante común, pero a raíz del COVID19, estamos seguros de que esta tendencia se extenderá a países con climas más amables.
Los accesorios juegan un papel muy importante en este espacio. Un espejo es una adición muy común, y a quién no le gusta mirarse justo antes de salir, para constatar que esté todo en orden. El florero también es una pieza clave, ya que la vista de flores apenas abrimos la puerta de entrada y pasamos al interior, es lo más invitador que hay.
La luz natural en el hall, siempre que esto sea posible, es el mejor adorno con el que podemos contar. Un hall bien iluminado por la luz del sol, nos dará la bienvenida siempre.
La mesa para el hall de entrada será más útil si tiene gavetas, ya que, de esta forma, podemos guardar las llaves, en lugar de dejarlas a la vista.
En este hall la puerta principal se pintó de un sensacional amarillo ocre, que se ve muy bien tanto con la madera, como con la piedra gris y el verde de las plantas.
El hall de entrada puede ser una oportunidad para que los arquitectos se luzcan, impactando a quienes entran en la casa por primera vez desde el primer momento. Es un buen espacio para dejar volar la imaginación y utilizar elementos y conceptos poderosos.
Nos encanta de este hall la elección del revestimiento del piso, con patrones geométricos intrincados, que van muy bien con la neutralidad de la paleta.
No sólo debemos enfocarnos en la practicidad de los accesorios, también es importante sumar adornos que le brinden a nuestro hall de entrada una identidad propia.
El uso de papel pintado, con colores vibrantes y patrones botánicos puede inyectarle esa personalidad que buscamos para este espacio, a menudo ignorado a la hora de decorar los recintos interiores.
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