Pequeña superficie GRAN vivienda

Esta imagen nos ha dejado sin palabras. Ya desde el exterior sabemos que la vivienda de Xavier Requeno tiene una intención muy clara: fusionarse con el espíritu natural y con la sencillez de Formentera. Por eso los colores usados y los materiales encuentran constantemente una representación real en la naturaleza. La madera, la piedra, la paja. 

El blanco es la luz y el azul es el mar.

Para disfrutar del exterior y de la naturaleza que rodea la casa vamos a encontrar varias terrazas, cada una de ellas con una función concreta y diseñada según sus características.  Hay una con dos sillones de bambú, pensada para el disfrute de la puesta de sol. Otra para comer en grandes grupos con un banco en esquina y otra terraza lateral pensada como comedor exterior o zona de meriendas. 

¿Queréis conocerlas?

Una buena forma de aprovechar espacio es diseñar un comedor con un banco en esquina. Así, la capacidad de comensales es muy flexible, a la vez que se aprovecha la pared y se libera espacio. En la imagen vemos el comedor exterior de diario, con el banco y la mesa construidos de fábrica. Un mantel de colores fuertes combina a la perfección con el azul cielo que vemos tanto en los cojines como en las contraventanas de madera. 

Pero, ¿os habéis fijado en el suelo? No hay forma más bonita de representar el valor que se le da a la naturaleza que incluyendo la piedra natural del entorno como pavimento. Una piedra que se fusiona con otras zonas revestidas de lamas de madera. Así, no se sabe muy bien dónde empieza la vivienda y dónde la naturaleza salvaje.

La terraza lateral de la que hablábamos antes es la que vemos ahora en la fotografía. Aquí se ha colocado una pequeña mesa de madera y varias sillas bajo un cobertizo de paja. Una forma muy original de remitirnos a la sencillez y a lo rural.  Además seguimos viendo el viejo pozo que nos recuerda a otras épocas en las que cada uno se abastecía con sus propios recursos.

En cuanto al entorno natural, se nota que el objetivo era alterarlo lo menos posible, para que su espíritu y su carácter se mantuviera.

Con esta imagen nos acercamos a esa zona de meriendas. Una terraza en la que encontramos muy pocos muebles, que además, son sencillos. Ya que el diseño nos quiere decir algo: no te fijes en los muebles, ni en la casa. Fíjate en lo que te rodea.

Ya dentro de la casa notamos cómo un ambiente rústico nos rodea por todos sitios. La madera aparece en cada superficie, también en los muebles. El azul vuelve a aparecer tanto en las ventanas como en algunos elementos de la decoración.

En la fotografía vemos la sala común con la cocina y el salón. Un espacio muy amplio gracias a que la sala de estar, al igual que el comedor exterior, cuenta con un gran banco corrido.

Podemos terminar diciendo que esta vivienda ha sufrido una transformación, tanto interior como exterior, que la ha dotado de sencillez y de pureza. Un diseño que ha conseguido fundirse con el entorno natural y que refleja unas intenciones muy claras: disfrutar de las pequeñas cosas y ser respetuosos con lo que nos rodea.

La madera, la piedra, la paja, el mimbre. Así como el color blanco y el azul han sido los elementos que han servido a los diseñadores para conseguir transmitir todo esto.